ANSIEDAD Y DEPRESIÓN

La depresión es más que estar bajoneado un día y/o sentirte triste. Cuando la tristeza dura bastante tiempo e interfiere con las actividades normales diarias, podrías estar deprimido. Los síntomas de la depresión, entre otros,  incluyen los siguientes:

  • Sentirse triste o ansioso con frecuencia o todo el tiempo.
  • No querer realizar actividades que antes eran divertidas.
  • Sentirse irritable, frustrado con facilidad o intranquilo.
  • Tener dificultad para dormirse o seguir durmiendo.
  • Levantarse muy temprano o dormir demasiado.
  • Comer más o menos de lo usual o no tener apetito.
  • Tener malestar, dolores, dolores de cabeza o problemas estomacales que no se mejoran con tratamiento.
  • Tener dificultad para concentrarse, recordar detalles o tomar decisiones.
  • Sentirse cansado, aun después de dormir bien.
  • Sentirte culpable, que no vale nada o desamparado.
  • Pensar en el suicidio o en hacerse daño.

Esta información no pretende proporcionar un diagnóstico médico de depresión grave y no puede usarse en lugar de consultar a un profesional de la salud mental. Si crees que estás deprimido, habla con tu médico o un profesional de salud mental inmediatamente. Esto es especialmente importante si los síntomas empeoran o están afectando sus actividades diarias.

La ansiedad
Entre los trastornos de ansiedad el más generalizado es el trastorno de ansiedad generalizada, que se caracteriza por un estado de inquietud, nervios internos y malestar constante que es vivido de forma angustiosa por la persona que la padece.

Detrás de estos síntomas físicos se encuentran pensamientos recurrentes de preocupación sobre cualquier evento del día a día, incluso cuando no hay motivos concretos. Al no tener la capacidad de controlar estos pensamientos persistentes o de preocupación, se pueden generar los síntomas de un Trastorno de Ansiedad Generalizada o TAG.

Las personas que experimentan síntomas crónicos de ansiedad generalizada tienen dificultades para dejar de preocuparse por la salud, la familia, el trabajo, el dinero u otros problemas variados. Por lo que se estima, que el origen de este trastorno se encuentra en presentar rasgos obsesivos de la personalidad.

¿Es posible tener ansiedad y depresión al mismo tiempo?

De hecho, no solo es posible, sino que además es bastante común. La mitad de las personas que sufren Trastorno de Ansiedad Generalizada (TAG) también tendrán depresión. Cuando las condiciones coexisten de esta forma, pueden ser más severas y duraderas de lo habitual.

También es posible ser diagnosticado con una de estas condiciones y tener los síntomas de la otra (pero a un nivel que la otra no sería diagnosticada). La manera en que los síntomas coinciden dificulta ser preciso con estadísticas, pero la estimación del número de personas con depresión que también experimentan síntomas de ansiedad puede llegar al 85% de los casos.