- Cuando comienzas a compararte con los demás. La comparación con los demás puede causarnos mucho daño.
«La gente exitosa compara sus logros con sus metas, mientras que los perdedores comparan sus logros con los de otras personas». Nido Qubein
- Cuando eliges a las personas equivocadas. Temor a la soledad, ansiedad por cumplir con diversos mandatos, una marcada disminución de la autoestima son algunas de las características que definen a las personas que en más de una oportunidad se tropiezan con la misma piedra y se enamoran de la persona equivocada.
- Cuando permites que el pasado la domine. Es común con ciertas situaciones difíciles en la vida. Pero no puedes dejar que esos momentos definan el resto de tus días, recuerda que son simples palabras. Si no dejas ir el pasado, siempre verás el presente de manera distorsionada, lamentándote por tus fracasos.»
- Cuando no nos permitirnos sentir. Tememos hablar demasiado y decirles a las personas lo que significan para nosotros. Al demostrarle a alguien su importancia para ti, te vuelves vulnerable. Sin embargo, esto no tiene nada de vergonzoso. Expresa tus sentimientos. Abre tu corazón, no dejes que se vuelva duro. Sé valiente en el amor.
- Cuando permanecemos en nuestra zona de confort. Al final del día, ¿sientes alegría de vivir? Cuando nos conformamos con algo menor de lo que queríamos desde el principio, destruimos nuestro propio potencial y nos engañamos a nosotros mismos. No arruines tu vida de esta manera.